Tips de cuidado

Consejos prácticos, concisos y
fáciles de integrar en tu día a día, organizados para una consulta rápida.

Rutinas

¿Debo tener una rutina de noche y otra de día?

Es una duda muy común. ¿La respuesta corta? Sí, pero con matices.

Todo depende de las necesidades de tu piel en cada momento. No significa que debas usar diferentes productos para el día y la noche. De hecho, puedes usar los mismos si cubren tus preocupaciones.

Mi consejo: Utiliza siempre un limpiador facial, tanto de día como de noche, y protector solar para el día (haga sol o no, que te veo venir).

A partir de ahí, puede que tu piel con el limpiador y un sérum/crema ya tenga suficiente, y por la noche, si no necesitas ningún tratamiento específico, puedes hacer la misma rutina que en la mañana.

¿Cuándo debo usar suplementación?

*Aclaración: Mi formación en suplementación me permite dar recomendaciones, pero aconsejo siempre una visita previa a tu médico/nutricionista.

Dejando esto claro, la suplementación es un extra a la alimentación; lo ideal es cubrir lo que tu cuerpo necesita con nutrición y, en el caso de que aun así no se lleguen a cubrir vitaminas esenciales o queramos un plus en este caso, para nuestra piel podemos incluir algunos suplementos, pero siempre, siempre como un extra, nunca como un sustitutivo de alimentación deficiente.

¿Qué productos usar si tengo la piel sensible?

Ten en cuenta que la piel sensible: No es un tipo, es una condición.

La piel sensible no es simplemente una piel reactiva; es un síndrome complejo o una condición de hiperreactividad cutánea donde la barrera protectora se encuentra comprometida. Las reacciones pueden ser subjetivas (escozor, ardor, tirantez) y pueden ser desencadenadas por cosméticos o factores ambientales. Si te identificas con la sensación de quemazón o irritación ante ciertos productos, necesitas una estrategia de calma y reparación inmediata.

Tu rutina debe priorizar la restauración de la función barrera y la disminución de la reactividad.

Tus prioridades:

  1. Limpieza: Evitar el jabón, el alcohol y los tensioactivos irritantes.
  2. Hidratación: Necesitas fórmulas enriquecidas con componentes que combatan la inflamación y prevengan la pérdida de agua (niacinamida, ácido hialurónico, ceramidas).
  3. Tratamientos: Los concentrados despigmentantes/antiedad deben ser seleccionados con mucho cuidado, ya que activos como el retinol o los AHA pueden ser irritantes en concentraciones altas. Opta por los que te ofrecen una exfoliación suave como el ácido láctico o la gluconolactona.

¿Puedo usar aceites si tengo la piel grasa o mixta?

Sí, no solo puedes, sino que es esencial para una limpieza eficaz y no agresiva.

La creencia de que cualquier aceite desencadena más grasa o acné es un mito que proviene de fórmulas obsoletas. La ciencia es clara: la piel mixta o grasa se caracteriza por una sobreproducción de sebo y residuos como el protector solar o el maquillaje, que son de naturaleza lipófila (basados en lípidos/aceite).

  1. Disolución sin agresión: El aceite es el único vehículo que puede disolver y arrastrar eficazmente el exceso de sebo y los residuos lipófilos sin necesidad de tensioactivos fuertes o jabón.
  2. Prevención del efecto rebote: Los limpiadores agresivos eliminan el sebo de forma excesiva. Esto desequilibra la barrera cutánea y la piel reacciona produciendo más sebo para compensar la sequedad.

Aplicación

¿Cuál es la forma correcta de aplicar un sérum?

Seguramente has visto a varias influencers o muchos vídeos de personas aplicándose el sérum con la pipeta pegada a la cara... Esto queda muy estético en el vídeo, pero no es nada recomendable (ni higiénico porque se pueden contraer bacterias).

La forma correcta: Aplica en la palma de tu mano 2 o 3 pulsaciones de la pipeta y aplícalo en tu rostro a toques; así te aseguras de que tu piel lo absorba correctamente y espera un momento para pasar al siguiente paso porque si no, según el producto que uses después o su consistencia, pueden quedar restos de ambos productos y, aparte de que no es nada agradable, estarás "derrochando" producto sin beneficios para tu piel.

¿Qué es la doble limpieza?

Consiste en la aplicación de dos tipos de limpiadores para asegurar la retirada total de residuos:

  1. Fase oleosa (disolver): En primer lugar, se utiliza una fórmula con base en aceites. Su función es disolver eficazmente los residuos lipófilos: maquillaje, protector solar de alta adherencia y el exceso de sebo.
  2. Fase acuosa (arrastrar): En segundo lugar, se aplica un limpiador con base acuosa para arrastrar los residuos restantes, las células muertas y las impurezas hidrosolubles, dejando la piel completamente limpia y lista para absorber los activos.

Sé lo que estás pensando: ¿Tengo que tener dos limpiadores?

Tengo una buena noticia, no es necesario. Mi objetivo siempre ha sido simplificar las rutinas por mí, por vosotrxs y porque añadir otros dos productos al neceser implica que un día nos dé pereza para cumplir con la rutina.

En Shafa Cosmetics encontrarás el limpiador dúo, una fórmula bifásica que te ofrece una doble limpieza óptima con hidratación y luminosidad extra.